domingo, 12 de septiembre de 2010

BOLONIA : LA VENDA ANTES QUE LA HERIDA?


No quiero caer en el tópico que algunos califican de pesimista de “poner la venda antes de que se produzca la herida” aunque con la herramientas que manejamos a día de hoy es muy probable que irremediablemente el accidente termine por dar su tristes frutos.
Es cierto que el conocido como PLAN BOLONIA aun no se ha puesto en marcha dentro de nuestros estudios de Arte Dramático, pero que a mediados de septiembre al menos en la comunidad de Andalucía no exista un pronunciamiento a modo de Instrucciones , Orden , Decreto… que desarrolle mínimamente el PLAN DE ESTUDIOS para el curso que ahora comienza, es cuanto menos muy peligroso , si a esto añadimos que los borradores que se manejan en esta comunidad , plantean notables y significativas diferencias, con la ya si publicada ORDEN4396/2010, de 13 de agosto, de la Comunidad de Madrid ( B.O.C.M. Núm. 205, 27 DE AGOSTO DE 2010) y no sabemos que se publicará en el resto de comunidades con respecto a estos estudios, la cuestión se pone aun peor.
Uno que pensaba que esto del plan Bolonia pretendía plantear las bases comunes de los estudios de grado, no ya sólo a nivel nacional , sino europeo, ve como cuestiones tan elementales como el número de horas por crédito, asi como las asignaturas de este primer curso tiene planteamientos distinto según la escuela donde se cursen los estudios,y dificilmente encuentran ese encaje común.

Hoy mas que nunca, y con la emergencia que nos marca el tiempo, quienes trabajamos a diario en estos estudios, tenemos un compromiso con ellos, y lejos de esperar a verlas venir, deberíamos tomar las riendas de este “caballo desbocado” ,que queramos o no, puede que marque la manera y el contenido de nuestro trabajo en los próximos años.

Exijamos a nuestros legisladores poder participar en el proceso de diseño, mediante grupos de trabajo por escuelas , especialidades, asignaturas, etc. entre otras estrategias de acción, si no queremos que del “servicio de urgencias”, terminemos “ingresados en planta” por un tiempo que desconocemos , “vendados” con unas “heridas” que no creo que nadie deseemos.

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